La próxima vez que usted piense en añadir algún producto a la selección de dulces de su panadería, considere los tan populares “macaron francés”, tan delicado y delicioso, es un postre tradicional con orígenes en el Renacimiento.
Las raíces de estas golosinas celestiales se remontan a los países árabes en la década de 1400, con las primeras variaciones del macarrón en Italia alrededor de 1500. A principios de 1800, los macarons se convirtieron en el postre favorito de la corte francesa. Como los franceses siempre experimentan con sabores, comenzaron a añadir rellenos a sus recetas a partir de 1830, siendo el inicio de la imagen del macaron francés como lo conocemos hoy en día. No es necesario ir muy lejos para reconocer que esta pequeña delicia se está apoderando de las panaderías de todo el Mundo.
¿Qué es un Macaron francés?
Un macaron francés, tradicionalmente, incluye dos discos de merengue de almendras, llenos de una capa de ganaché, mermelada de fruta o crema de mantequilla en una variedad de sabores. Con tanta versatilidad, la imaginación de un panadero es libre para explorar y crear combinaciones de sabores únicos para destacar su paladar creativo. Opciones de sabor comunes, para los macarons tradicionales incluyen sabores dulces como el chocolate, caramelo y miel, elogios de frutas como la frambuesa, arándano, naranja o limón, e incluso los gustos exóticos como grano de pimienta, chile, rosa y lavanda.
¿Cómo hacer el Macarons (El Método Francés)
Si bien la técnica para hacer un macaron francés puede tomar algún tiempo para dominarla, la receta básica es bastante sencilla. Esperamos que esta receta le inspire para crear sus propios dulces únicos y tal vez se inicie en el camino de ofrecer a sus clientes un escape libre de gluten.
Ingredientes:
• Claras de huevo 100 g (separados y se dejan a temperatura ambiente durante 24 horas)
• Harina de almendra 110g (finamente molida almendras)
• 165g azúcar glas
• 60g azúcar granulada
• Colorante vegetal (opcional)
En primer lugar, tamizar la harina de almendra y el azúcar en un tazón grande y dejar de lado. Si se utiliza un colorante, mezclar el color de los alimentos en polvo y el azúcar granulada juntos.
Comience batiendo las claras de huevo hasta que estén espumosas. Poco a poco agregue la mezcla de azúcar granulada, una cucharada a la vez, hasta que las claras de huevo empiezan a formar picos duros como meregue. Una vez formado, mezcle el merengue en un tazón grande con la mezcla de almendras comida y azúcar que se habia dejado apartado con anterioridad. Suavemente ir mezclando todo hasta que los ingredientes secos se incorporen plenamente. Su mezcla debe ser brillante y la consistencia de la masa gruesa como la de un pastel. Tenga cuidado de no mezclar en exceso.
Vierta la mezcla en una manga pastelera “equipado con una punta # 11 “conchas redondas aproximadamente”. Aparte prepare una bandeja para hornear equipados con un tapete de silicona. Comenzar a hacer los circulos de meregue sobre la bandeja y de unos golpecitos a la bandeja sobre la mesa de trabajo para aliviar las burbujas de aire que puedan estar en la mezcla y aplanar los picos formados mientras se usaba la manga. Dejelos reposar en el mostrador durante 30-60 minutos o hasta que formen una piel seca. Esto ayudará a las conchas macaron a mantiener su forma y se levantaran correctamente en el horno, dándoles sus distintivos “pies”.
Precaliente el horno a 325⁰F por 15 minutos antes de hornear. Justo antes de que esté listo para colocar las conchas en el horno, reduzca la temperatura a 285⁰F. Hornear durante 12-15 minutos hasta que las cáscaras se endurezcan, pero no doradas. Sacarlas del horno y dejarlas enfriar. ¡Ya estarán listas para disfrutar!